El desafío más grande que enfrenta el mundo en el siglo XII proviene del estrés en los individuos y en las comunidades.
El estrés disminuye nuestra reserva metabólica y aumenta el riesgo de lo que llamamos el síndrome metabólico. El síndrome metabólico se compone de obesidad, colesterol alto, presión arterial alta, y diabetes, así como inmuno-activación crónica relacionada al estrés, que prepara el terreno para las enfermedades crónicas no transmisibles. Sigue leyendo